Jorginho Gularte empezó a tocar el tambor de muy chico mezclándose en las comparsas del Barrio Sur. Después aprendió guitarra y compuso muchas canciones que quedaron registradas en cuatro discos que grabó en poco más de diez años: La Tambora, Influencia, Almazen y Fata Morgana. En su música el candombe es protagonista, como en «Tambor tambora», este homenaje al derruido conventillo Medio Mundo, que vio pasar varias familias y más de una cuerda de tambores desde la legendaria dirección de Cuareim 1080.
El mundo encantado de los tambores toma vida en las ilustraciones de Andrés Silva, que recupera tanto la alegría y el bullicio del viejo conventillo como la nostalgia por lo que ya no está. «Tambora tambora» es un puente con el candombe y con el Barrio Sur, ese puñado de callecitas que cada verano se inunda de los colores y los repiques de las comparsas.
El libro está acompañado de un disco con la versión de Damián Gularte.