¿Hay un médico en la sala? Comprueba la presión arterial de tus pacientes, escucha su corazón con el estetoscopio y aplica la pomada. Las historias que los peques pueden inventar mientras diagnostican y curan a sus «pacientes» son infinitas.
Realiza revisiones con el pulsómetro, la ficha médica, el termómetro, la pomada, la jeringuilla y el estetoscopio.
Los pequeños médicos y médicas pasarán las horas entretenidos y podrán desarrollar la confianza en sí mismos y la imaginación jugando a juegos de rol.